viernes, 14 de octubre de 2016

Ordenadores y desarrolladores adolescentes

El éxito que tubo la  VCS de Atari y la aparición de alguna probabilidad  de crear 3rd Parties hizo que las empresas de software digital atraídas por promesas de beneficios falsos inundasen el mercado de productos de nula calidad. Warner perdió 2,5 Millones de dólares en muy poco tiempo por el repentino declive del sector. En 1984 Warner vendió Atari y se cerró una era del entretenimiento. En el caso del sector de los videojuegos hubo una en Europa con la llegada de otro hito fundamental para el sector: la Commodore 64. La Commodore 64 era un ordenador doméstico con 64Kb de RAM, de dónde provenía su nombre. 64Kb es aproximadamente 1 segundo de filme de vídeo digital, menos aún si hablamos de metraje en HD. ¿Por qué fue un éxito? Probablemente por dos razones fundamentales: la primera su precio ya que salio con un precio de mercado de 595 dólares, que comparado con máquinas de Apple y Atari era muy competitivo; la segunda, y quizá la fundamental para el tema que tratamos era el Commodore BASIC.



La Commodore 64 arrancaba en Commodore BASIC usaba una programación muy sencilla que permitía ala persona escribir sus propios programas. En Europa, revistas especializadas del sector publicaban código enviado por los lectores para que estas lo divulgasen y otros pudiesen copiarlo. Esta posibilidad abrió la posibilidad de que muchas mentes se pusiesen manos a la obra a crear sus propios juegos y empujar el hardware de estas primitivas máquinas hasta esprimirlas. A principios de los 80 adolescentes británicos comenzaron a crear juegos para la Commodore, el Amstrad CPC, la ZX Spectrum. Un ejemplo de estos desarrolladores adolescentes son los los hermanos británicos, Philip y Andrew Oliver conocidos coloquialmente como "los gemelos Oliver". Comenzaron a desarrollar profesionalmente juegos de ordenador mientras estaban todavía en el colegio. Su primer juego, llamado "Road Runner" fue enviado a una revista y publicado en 1982, cuando sólo tenían 13 años. La revista les pagó 50 libras por el juego, pero su popularidad se hizo inmensa. Sólo 3 años más tarde presentaban su primer trabajo como profesionales del sector en la empresa Codemasters, el "Super Robin Hood" para el Amstrad CPC. Con 16 años eran ricos y una meta para millones de chicos.Su obra cúlmen fue el popularísimo "Dizzy" y sus secuelas, que aún se considera el precursor de muchos conceptos fundamentales del actual género de las plataformas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario